Bourdieu comenta un tipo de violencia simbólica: “habitus” y
la describe como la creencia de que las cosas son como son, y que es normal que
sucedan como suceden. Sobre todo, implica una reproducción y naturalización de
los comportamientos sociales y valores culturales.
Esta forma de pensamiento cultural y de violaciones afecta
gravemente a nuestra sociedad, principalmente por que las volvemos evidentes e
incuestionables actos sociales, además también tiene que ver con la limitación
del pensamiento o de percibir las cosas; dejamos de pensar nuevas formas porque
ya está algo establecido, limitando nuestra creatividad y nuestra autonomía.
La violencia simbólica afecta el conocimiento de dos formas,
una de ellas es principalmente que las mujeres en general en la mayoría de los
países asisten menos a la escuela que los hombres, lo vemos desde que el hombre
era mandado a la escuela por ser el siguiente cabeza de la familia, esta idea
ha ido cambiando, pero aún permanece en nuestro país, esto provoca el mismo
círculo de subordinación.
La otra forma que afecta el conocimiento es la limitación
del pensar, por comentaba antes tiene que ver con la violencia simbólica “habitus”
lo que ya está planteado por nuestra sociedad, lo que limita nuestra autonomía
y nos crea patrones a veces muy difíciles de quitar por cuestiones culturales.
Como concusión en nuestra sociedad vemos a violencia física
como la única forma de violencia que existe, sin embargo, este artículo leído
me ha permitido saber que existe y se le llaman violencia simbólica todo lo que
tiene que ver con obligación de cambio de pensamientos o la obligación de un
trabajo al cual no queremos realizar, como en el caso del trabajo forzado.